Influenciado por un colorido universo y emociones que sólo se viven en México, Richard Orlinski encuentra la inspiración en calaveras, la lucha libre, regionalísmos, íconos prehispanicos, canciones, flores y hasta el picante.
Maravillado por la cultura Mexicana Richard Orlinski decide hacerle un tributo combinándolo con su pasión por el arte pop y el graffiti, en su icónico WILD KONG. Empleando tecnicas mixtas que llevaron más de 3 años en investigación y experimentación hasta lograr adueñarse del graffiti usando stencils y tags para convertir sus piezas en “Street Art”.